El desafío que enfrentamos todos

Ilustración por Eugenia Assanelli

Ilustración por Eugenia Assanelli

Los que están en la cima de la montaña no cayeron allí
— Vince Lombardi

A nadie se le ocurre subir a un avión sin antes saber a dónde va. Es el pasajero quien decide el destino de su viaje. Jamás dejaría que el piloto o el empleado de la aerolínea tomaran esa decisión tan importante.

Sin embargo, muchos inversores nunca definen su destino. Si no tomás conciencia de ese primer paso, vas a invertir mal.  Si quien te asesora no hace un esfuerzo por conocer y entender tu destino, tus resultados no van a ser los esperados. Y definir tu destino como inversor es más fácil de lo que pensás, porque todos nosotros -de una manera u otra- estamos yendo al mismo lugar.

Nuestra vida es un viaje

Podemos pensar en nuestra vida de trabajo como un viaje hasta la cima de una montaña. En la cima, llegamos a un punto crítico: el Momento de la Verdad. El Momento de la Verdad es el día que definimos no trabajar más. Es un hito importante en nuestra vida porque definimos cómo vamos a vivir el resto de nuestras vidas.  Sin capital financiero propio en ese momento, nuestra calidad de vida dependerá de la jubilación que nos toque. Con capital financiero suficiente, podremos vivir la vida que nosotros queramos.

Nuestro destino se define con un número

Nuestro Número es un concepto sencillo e importante para cualquier inversor. Es el capital financiero disponible en el Momento de la Verdad. Si nuestro deseo es vivir bien cuando no trabajemos más, nuestro destino como inversores puede ser sólo uno:  lograr un Número suficiente para financiar esa vida.  Cada uno de nosotros debe estimar su Número y después definir un plan de ahorros e inversión para lograrlo. Si apuntás a ese destino tenés muchas más chances de llegar, aun si tuvieras que hacer algún desvío en el camino.

Es sencillo estimar Tu Número, si usamos tres supuestos. Primero, asumimos que tus retiros se mantienen estables en términos reales durante tu jubilación y aumentan año a año por inflación. Segundo, asumimos que invertís tu capital durante tu jubilación a una tasa igual a la inflación. Tercero, asumimos que sabés cuándo vas a morir y que vas a usar todo tu capital en vida. El resto es fácil, lo único que tenes que hacer para estimar tu Número es definir cuanto querés retirar anualmente durante tu jubilación y después multiplicarlo por el número de años que te quedan.

 
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Por ejemplo, si hoy tenés 60 años y querés jubilarte inmediatamente con 1.000 dólares/mes hasta los 90 años, vas a retirar 12.000 el primer año. Tu Número entonces es USD360.000 (12.000*30).

Si hoy tenés 30 años y querés jubilarte a los 60 con 1000 dólares por mes, es importante ajustar tu retiro deseado para mantener el poder de compra. En el día a día, no nos damos cuenta del impacto real de la inflación pero dado que estamos hablando de muchos años para adelante, debemos preverla. Si asumimos una inflación en dólares es de 2,5% por año, dentro de 30 años, vas a necesitar 2.092 dólares para comprar lo mismo que comprás hoy con 1000 dólares. Como consecuencia, vas a retirar 25.104 dólares (2.092*12) el primero año de tu jubilación. Tu Número es USD755.124 (25.104*30).

¿Querés calcular tu NÚMERO? Lo podés hacer aquí.

Tu Número seguramente es mucho más grande lo que imaginaste. Sobre este punto, no te puedo ayudar mucho.  Vivir 20 o 30 años sin trabajar cuesta un montón. Lo que te puedo decir es que la única forma de llegar a la cima de tu Montaña es paso a paso.  Solo te queda definir si estás dispuesto a hacer el esfuerzo necesario para asegurar un futuro digno. Y después, comenzar tu viaje.

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